¡El agua cambia de ropa!
¿Sabías que el agua puede ser muy camaleónica y cambiar de aspecto? ¡Así es! Aunque siempre sea agua, puede vestirse de diferentes formas. ¡Vamos a descubrirlas!
El agua tiene tres disfraces
El agua puede ser como un mago y transformarse en tres cosas diferentes:
- Hielo: Cuando hace mucho frío, el agua se convierte en hielo. El hielo es duro, frío y resbaladizo. Lo puedes encontrar en los polos, en los congeladores y en las bebidas cuando las metemos en el congelador.
- Agua líquida: Esta es la forma más común en la que encontramos el agua. Es líquida, transparente y podemos beberla. La encontramos en los ríos, los lagos, los mares y en nuestros vasos.
- Vapor: Cuando calentamos el agua, se transforma en vapor. El vapor es invisible y sube hacia arriba. Lo puedes ver cuando el agua hierve en una olla o cuando sales de la ducha y el baño se llena de «vaho».
¿Cómo cambia de disfraz el agua?
El agua cambia de disfraz cuando le damos calor o frío. Por ejemplo:
- Del agua al hielo: Cuando metemos agua en el congelador, se vuelve muy fría y se convierte en hielo. ¡Es como si el agua se pusiera un abrigo muy grueso para protegerse del frío!
- Del hielo al agua: Si sacamos el hielo del congelador y lo dejamos a temperatura ambiente, se derrite y vuelve a ser agua líquida. ¡Es como si el hielo se quitara el abrigo y se pusiera un vestido más ligero!
- Del agua al vapor: Cuando calentamos agua en una olla, se convierte en vapor y sube hacia arriba. ¡Es como si el agua saltara y se convirtiera en una pequeña nube!
Alberto Espinosa García 